Cuando Homeshake estuvo por primera vez en la Argentina, Peter Sagar terminó en un lugar inesperado. El músico canadiense (el hombre detrás del alias en cuestión) había llegado a Buenos Aires para ser parte del Personal Fest 2017, y la recepción del público fue más que suficiente para armar un sideshow en La Trastienda poco después. Entre una cosa y la otra, Sagar quiso aprovechar un día libre y decidió prescindir de la ayuda de terceros. “Me puse a mirar el mapa, vi que nuestro hotel quedaba cerca del río, así que me mandé a caminar en esa dirección. Cuando me quise dar cuenta, terminé en el aeropuerto, sin razón alguna. Por lo menos pude probar buena comida, dice al repasar su inesperada excursión a Aeroparque, antes de una nueva visita a la Argentina este miércoles 12 en Niceto Club (Niceto Vega 5510), con Juan Wauters y Raybet como invitados especiales.
A falta de uno, Homeshake presentará en Palermo dos discos, CD Wallet y Horsie, ambos publicados en 2024 con pocos meses de diferencia entre sí, y ambos con un inesperado giro guitarrero para la música de Sagar, caracterizada por ser un R&B galáctico donde los sintetizadores parecían ser una norma a sostener a rajatabla. “Simplemente estaba disfrutando mucho tocar mucho la guitarra. Siempre me gustó como instrumento, aunque no fue mi primera elección, lo terminó siendo después de muchos años”, repasa el músico. Y agrega: “empecé tocando el piano de chico, después me pasé a la batería y recién ahí tuve una guitarra, aunque pasé muchos años como bajista en bandas antes de poder sentirme un ‘guitarrista’”, dice también al repasar el puesto que ocupó en la banda de Mac DeMarco entre 2011 y 2014.
Ese repaso polifuncional es también el que explica la dinámica creativa de Homeshake: al igual que Kevin Parker, Sagar compone, graba y produce la totalidad del material de la banda por su cuenta sin abrir la puerta a terceros, una política nada despreciable en la era del feat. “Trabajo mucho en aislamiento. Me siento muy cómodo con esa decisión y nunca sentí la necesidad de sumar a nadie más. Tampoco es que tenga problemas con eso, hice cosas para otra gente y tengo un proyecto colaborativo en agenda, pero siempre sentí a Homeshake como algo súper personal y no quiero compartir el chiste con otra gente”, dice. Por eso, el viraje artístico de sus últimos dos discos también responde pura y exclusivamente a una cuestión personal: “No estaba buscando un sonido en particular, sino simplemente hacer canciones que le podrían haber gustado a mi yo adolescente”. .
Con un show que se mueve dentro de los amplios márgenes del bedroom pop, en vivo Homeshake suele apelar a un cover que parece inesperado para ese formato: “Change (In the House of Flies)”, de Deftones. La elección, dice, es un vínculo con su preadolescencia, cuando el nü metal ingresó a la casa familiar. “No es algo que se parezca mucho a lo nuestro”, dice entre risas”. Y agrega: “Cuando yo era chico, mi hermana mayor amaba Deftones y yo tomaba prestado su White Pony y lo escuchaba un montón. Eran una banda que me parecía muy cool cuando era chico, yo no sabía nada sobre ellos pero ese disco me encantaba cuando era pibe”, dice sobre el álbum bisagra de la banda de Chino Moreno, además de admitir que el grupo “envejeció bastante bien” para su gusto.
A pesar de que existen algunas señas particulares a lo largo y ancho de su discografía, no hay en el cancionero de Homeshake una fórmula fácilmente reconocible, algo que es motivo de orgullo para Sagar. “No se me ocurre nada más aburrido que intentar que el público sepa qué puede esperar de mí. Mi música siempre suena a mí porque soy la persona que la está haciendo, pero estoy constantemente creciendo y cambiando”, dice. Y, para cerrar, agrega una metáfora particular. “Tengo muy presente algo que leí que dice que cada siete años las células de tu cuerpo se renuevan completamente, así que técnicamente sos una persona nueva. Pienso mucho en eso porque siento que hago muchos cambios de manera consciente y también inconsciente, y si mi música se mantuviera igual en todo sería algo muy poco genuino, estaría haciéndolo por los motivos incorrectos”.